- La subiste? - grite y asintió
- Si, vos me dejaste, igual corté la parte de tu firma - dijo intentando tranquilizarme pero ya había quedado preocupada
- Decime ya lo que pusieron - dije
nerviosa
- Las chicas - dijo - son tremendas
- Dame eso - grité sacándole el celular para leer.
Además de varios "me gusta" tenía dos comentarios, claro, uno era de Jenny y el otro de Lola.
"Mmm espero que sea lo que me estoy imaginando" - puso Jenny
"Creo que me perdí mil capítulos, cuanta ternura Serrano!" - comentó Lola junto con un par de corazones
- Las odio - dije riendo - se re dieron cuenta
- Te dije que iba a traer polémica la foto - dijo y le devolví el celular
- No hay que dar explicaciones y punto, ni a ellas les voy a decir, por lo menos hasta cortar todo con Fran - dije y su cara cambió cuando lo nombré
- Osea que oficialmente soy "el otro", que bien - dijo irónico
- No me digas eso, me haces sentir re mal - dije haciendo puchero - vos sos el único, deja de decir esas cosas - dije agarrando su cara entre mis manos para darle un beso.
Me partía el alma verlo así, me hacía sentir muy culpable. Tenía que arreglar las cosas urgente.
Fui a buscar mi celular que había quedado en su cuarto y me parecía raro que no haya sonado ni una sola vez. Claro, estaba apagado, cuando lo prendí tenía mil llamadas perdidas de mamá, un par de Fran, y varios mensajes en el grupo de whatsapp que tenía con las chicas.
Llamé a mamá antes que nada para informarle que estaba sana y salva, por lo exagerada que es seguro ya estaba llamando a la policía cuando no me vio en mi cama a la mañana. Me dijo de todo por haberme ido tarde, por haber conducido con este clima, por llevarme el auto, y sobre todo por no avisarle que no dormía en casa. Le dije que me había quedado en lo de Jenny, tuve que mentir, pero si le decía la verdad iba a ser peor. Le aclaré que me iba a quedar a pasar el día ahí, o por lo menos hasta que dejara de llover, en realidad no me pensaba ir hasta que Julian me echara. Corté y llamé a Fran, con una mochila de culpa en mi espalda que pesaba unos quinientos kilos.
- Bombón - dijo bastante efusivo cuando atendió
- Fran, cómo la pasaron anoche? - pregunté sin saber que decir
- Bien, bárbaro, pero te re extrañé - dijo tierno y suspiré, no podía ser tan forra - vos que hiciste? Me extrañaste?
- Emm, me vine a lo de Jenny a dormir y nada, recién nos levantamos por eso no te atendí - volví a mentir
- No me respondiste si me extrañaste...
- Si, te extrañé Fran - dije y al darme vuelta lo veo a Julian entrando por la puerta, con su peor cara para luego tirarse en la cama, literalmente
- Que linda sos, tengo muchas ganas de verte
- Yo también, tengo que decirte algo importante - dije sacando fuerzas no se de donde
- Que miedo, espero que sea bueno - dijo riendo y yo lo imité, sin decir nada - hoy nos podemos ver?
- No creo, porque estoy con Jenny ahora, pero no se, cuando pueda te aviso, dale? - dije mientras miraba a Julian, quien estaba acostado en la cama, boca abajo - tengo que cortar porque la deje sola a Jenny - agregué
- Bueno dale, espero que sea pronto, te quiero mucho Ori - dijo y me mordí el labio, con pena
- Nos vemos Fran, beso
- No, para - dijo prácticamente gritando - vos no me querés?
- Si, ya lo sabes, como estas con las preguntitas hoy eh - dije en voz baja intentando que Juli no escuche
- A veces es bueno que te lo recuerden, y vos no lo haces nunca, pero bueno, deja - dijo un poco triste y me sentí doblemente peor
- Perdón Fran, sabes que soy así con esas cosas, nunca digo lo que siento, pero vos sabes que yo te quiero mucho, no? - dije sincera, lo que me pasaba con Julian no impedía que yo lo quisiera a Fran, tal vez más como amigo, pero lo quería en fin
- Lo se, a veces dudo, pero se que un poco me queres - dijo y sonreí, más culpable que antes
- Te dejo Fran, cuidate - dije para cortarle y evitar líos con Julian que había estado escuchando gran parte de la conversación.
Dejé el celular en la mesita y me pare al lado de la cama, del lado donde él estaba. Tenía los ojos cerrados pero sabía perfectamente que no estaba dormido.
- Juli - dije mirándolo desde arriba y me ignoró, haciéndose el dormido - ya se que estas despierto, mirame - dije riendo pero mi cara cambió cuando vi que giró su cabeza para el lado contrario al que yo estaba.
Con cuidado me acosté sobre él, sobre su espalda, pasando mis manos con dificultad entre su cintura y el colchón para abrazarlo, y apoyé mi cabeza en el hueco de su cuello.
- Me vas a ignorar mucho tiempo más? - pregunté y fue en vano, seguía con la misma postura.
Saqué mi mano derecha de su cintura para llevarla a su pelo, sabía que se relajaba cuando le tocaban el pelo y eso hice, mientras dejaba unos cuantos besos en su espalda, sus hombros y su cuello, donde estuve más tiempo. Noté que su respiración estaba cada vez más agitada y sonreí victoriosa. Seguí besando su cuello con suavidad, ternura, y pasión, llegando a dejarle varias marcas, por las cuales se enojaría luego así que me detuve.
- Sos una hija de puta - susurró entre risas, con los ojos aún cerrados
- Perdón, me dejé llevar - dije y se mordió el labio, lo que me dio tanta ternura que me estiré hasta poder dejar un beso en su mejilla - se te fue el enojo?
- No - dijo volviendo a ponerse serio y bufé
- Por qué te comportas como un nene Julian? 20 años tenés - dije sin despegar mi mirada de él, que seguía en la misma pose, y con los ojos cerrados
- Porque estoy celoso, que querés que te diga? Si no te gusta como soy te podes ir yendo - murmuró abriendo los ojos para mirarme y morí de ternura al instante
- Aww sos más tierno - dije sonriendo - me encanta como sos, hasta cuando te pones así, como un nene de cinco años, me encantas - dije mirándolo a los ojos y suspiró
- Por qué le hablas así si lo vas a dejar? - preguntó con mala cara
- Así como? Si hasta le dije que tenía que hablar con él - dije con el ceño fruncido y él puso los ojos en blanco
- Ay te extrañé Fran, sabes que te quiero mucho, no? - dijo imitándome y negué con la cabeza
- Bueno me preguntó si lo extrañé, me siento bastante forra por cagarlo con vos, encima querés que le diga que no lo extrañé? Y de verdad lo quiero, más como a un amigo, pero lo quiero, tanto como vos la querés a Sabrina - dije de mal humor y se rió, irónico
- No vuelvas al tema de Sabri porque no tiene nada que ver
- Ay "Sabri", estoy harta de que vivamos peleando por ellos dos, harta, tendríamos que aclarar nuestras prioridades, y dejarlos de lado un poco - dije calmándome
- No quiero que peleemos todo el tiempo, pero me molesta que hables así con él y encima en mi cara
- Tenés razón, estuve mal - dije bajando la mirada
- Muy mal - agregó - no me gusta tratarte así Ori, pero vos tampoco me des motivos - dijo y volví a mirarlo a los ojos
- Perdón - hice una pausa en la que él asintió - te quiero mucho, mucho, mucho, mucho - dije dándole un beso corto entre cada "mucho" que decía.
Se dio vuelta con cuidado de no tirarme, quedando de frente a mí, bajo mi cuerpo. Depositó su mano en mi nuca para acercarme a su boca y dejar allí el mejor beso de reconciliación (sin contar el de la noche anterior). Apoyó su otra mano en mi cintura para tenerme aún más cerca, como si eso fuera posible.
- Podrías seguir con lo que empezaste acá? - preguntó con dificultad ya que yo no quería dejar de besarlo y señaló su cuello, con una sonrisa pícara
- Sus deseos son órdenes - susurré.
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